1. Escuchar el ruido: uno de los primeros indicios de que el turbo está fallando es el ruido. Esto puede ser un sonido siseante, silbido o una vibración.
2. Revisar el olor a quemado: también puede haber un olor a quemado proveniente del turbo. Esto puede ser un indicio de que hay una fuga de aceite o alguna otra anomalía.
3. Falta de potencia: si el turbo está fallando, puede haber una pérdida de potencia. Esto puede manifestarse como una disminución en el rendimiento del motor.
4. Revisar el aceite: el aceite también puede revelar si el turbo está fallando. Si el aceite está sucio y/o turbio, esto puede ser una señal de un problema con el turbo.
5. Chequear el nivel de presión: